Salgo de casa. me siento raro. No tengo ganas de hablar, ni de saludar, ni encontrarme con gente conocida. Quizás sea porque hace poco que acabo la bulliciosa Navidad y todavía tengo ocupado mi capacidad de ruidos con el estruendo de petardos o porque cuando salí a la ultima persona que vi en televisión fue […]
Cuando escribo esta Plaza Alta todavía es Navidad. Estoy de vacaciones, me pongo a escribir acompañado por el dulce bullicio de hermanos y sobrinos. Me fastidia ser feliz a plazo fijo pero no puedo evitar ese tono amielado de la fecha. Escribo desde el corazón dulce del turrón de Castuera y el mazapán de la […]