Para mi todavía es sábado aunque sea domingo. Son las dos de la madrugada y el calor no me deja dormir. Abro el procesador de texto y el Facebook donde veo una fotografía del recién estrenado Presidente en Olivenza. Vara tiene aspecto de buena persona, de que le importa la gente y no solo los números, aunque va a tener que hacer muchos números para contentar a los que le esperan como una salvación.
El buen funcionamiento de la región también dependerá de quién se rodee. Nosotros, los de Sanidad, según dicen, hemos tenido suerte con Vergeles. Los que le conocen hablan de su capacidad, sensatez y sentido común, además de estar comprometido con el sistema sanitario, al menos es médico y no maestro. Aunque la Sanidad la formamos los profesionales el objetivo principal es el usuario.
Ahora llega todo ese rollo de nombramientos y ceses, es madrugada y me atrevo a escribir rollo en lugar de proceso, por la noche las cosas se ven diferentes.
Los funcionarios estamos a la espera. Primero cambia el Gobierno,después el Presidente,Consejero,Directores, Subdirectores, Gerentes. Los nuevos Jefes de Recursos Humanos, llaman a los suyo, algunos con el único mérito haber subido a la escalera para pegar carteles. Toda va cambiando hasta que llega a nosotros, los de abajo. Algunas veces los que tenemos cargos menores sin vínculos políticos somos cesados y cambiados por los que mejor dan palmadas en la espalda. Cuando llega un nuevo Director de Recursos Humanos lo cambia todo pensando que lo anterior es malo, así, lo que antes se resolvía con un documento,ahora
necesita tres, hasta que el tiempo devuelve la cordura a las administraciones y se dan cuenta, después del caos,que quien mejor conoce el trabajo son las trabajadores y se vuelve a hacer como siempre: simplificando la cosas, haciéndolas fácil para el usuario y el funcionario. Hay algunos que llegan avasallando, dando golpes en la mesa, no saben que para ser jefe no hace falta exhibir músculo delante de los trabajadores, que lo mejor es pasar desapercibido y mandar con el ejemplo, como los árbitros de fútbol, el destacado es el que controla el partido pasando inadvertido.
Luego, cuando todos los cargos directivos están nombrados, le toca el turno al material, otro pico para una región pobre. Los sobre que dicen “Consejería tal” cambian por “Consejería cual” igual que: carpetas, carteles, folios con membrete…Un pellizco que se pueden destinar a otras necesidades.