Era domingo, fui al trastero a llevar cacharros. lo guardo todo. No se que habrá sido de aquella novia que tenía cuando hice la mili, pero aun conservo todas sus cartas escritas con un el trazo fresco de 20 años y grandes círculos que coronan las íes. Cuando iba con el coche cargado me tropecé con la maratón, Todos los años escribo de la carrera con la nostalgia de haber sido corredor y con el propósito de volver a serlo. Este año no he ido a verla pero la casualidad hizo que me topase involuntariamente con ella. La vi frente al periódico HOY, a mi lado estaban varios componentes de la comparsa Yuyuba que animaban con ritmo carnavalero.
Aunque creo tenerlo escrito de otros años, sigo pensando que lo duro del maratón no es el esfuerzo en el día de la carrera, quizás eso sea lo más fácil con el apoyo de otros corredores y el calor del público. Lo duro es la preparación. Días de frío o calor en los que hay que levantarse del sillón para calzarte un pantalón corto y salir a la calle a correr. Sacrificas películas, libros, tiempo a la familia. Muchos corredores cuidan también la alimentación y todo a cambio de la satisfacción personal. Un esfuerzo sin recibir beneficio económico demostrando que las cosas importantes no se compran ni se venden. El único objetivo para un corredor popular es llegar a la meta. Una lección para muchos de generosidad en el esfuerzo no recompensado con dinero. Esta año ha sido récord de participación. La mayoría hacen la media 21 km, aunque también los hay que la hacen la heroicidad de completarla. Me ha sorprendido ver a gente nueva que conozco por distintos motivos y no me imaginaba que corrían: Judith Figueiredo, Corresponsal de Televisión Española en Badajoz, Julio y Dioni de Llerena, la joven de Oliva que me vendía el periódico en kiosco, ya cerrado, de María Auxiliadora a la que le daba los libros del Perigallo para que me los trajera firmado. Hay muchos más que no cabrían en este artículo, pero como no nombrar a mi cuñado. Juanito el de Sevillana,Antonio de Comisiones,ingenieros,maestros, psiquiatras,parados… Veteranos y novatos le quitaron protagonismo a las elecciones andaluces y al partido Madrid- Barcelona convirtiéndose en el centro de atención de Badajoz un domingo por la mañana