No está diseñado que un niño llegue al mundo con una discapacidad, al contrario creo que es algo que no se espera porque lo que deseas es que tu hijo venga al mundo sin ninguna “enfermedad”, no creo que exista alguien tan masoquista para desear que venga alguien al mundo así, pero ¿y si esa vida está creciendo incipientemente dentro del seno materno?, ¿qué medida hay que tomar, la de la selección eugenésica y que solo vengan los mejores al mundo, como ya adelantaba Aldous Huxley en su mundo feliz?
¿Quién decide quien tiene derecho a vivir y quién no? No sabemos lo que nos depara la vida, pero la vida en sí misma en un regalo. Solo que en algunos momentos ese regalo no es el que te esperabas, de ahí la importancia aun más de acompañar más que dejar solos a aquellos padres que quieren acoger una vida con una dificultad. Pues está visto que solo aquellos que logran superarse así mismos desde una limitación personal son los que dan “más vueltas” a aquellos que nos consideramos normales por el solo hecho de que no tenemos ninguna.
Así que bienvenidos sean todas aquellas personas que quieran sumar esfuerzos por acompañar, por acoger, por facilitar, por apoyar, por luchar,…por un sinfín de actitudes que ayuden a construir no un mundo perfecto sino un verdadero mundo feliz donde es posible dar cabida a todo el mundo que llame a la puerta para entrar en la vida.