Dedico a las personas llamadas discapacitadas mi primera reflexión de este joven 2022.
El 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad con el objetivo de promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la sociedad, así como concienciar sobre su situación en todos los aspectos de la vida. Aprovechemos esta sensibilidad, pero me resisto al término.
Deberíamos dedicar un día a la Discapacidad, a esa que nos lleva al desencuentro sistemático con los demás, a la que nos hace dudar y sospechar de todos, a la que nos impide ponernos en el lugar del otro, a la que se instala en las penalidades del pasado, a las que valora los salarios de manera tan desigualdad. Estas sí son discapacidades.
Deberíamos dedicar un día a la Discapacidad de los que nunca piden perdón, a los que negocian el bien común al margen del pueblo, a los que pierden el tiempo en empujar al prójimo para ocupar los primeros asientos. Estas sí son discapacidades.
Dediquemos un día a los Capacitados. A esos que se esfuerzan y luchan por adquirir una formación que le impedimos con leyes educativas no inclusivas, a los que no protestan porque se acostumbraron a ser los últimos siendo realmente los primeros, a los que dan sentido a la familia, a la fragilidad de la existencia humana dignificándola.
No es sólo una cuestión de términos, si no de ver la vida desde distintos parámetros.