Óscar Vadillo | ENRIQUE FALCÓ - Blogs hoy.es >

Blogs

Enrique Falcó

ENRIQUE FALCÓ

Óscar Vadillo

Lo que son las cosas. La primera vez que me presentaron a Óscar Vadillo, me cayó fatal, y me atrevería a afirmar que la antipatía era mutua. El destino no está carente de cierta ironía. Lo que no lograron nuestros amigos comunes, lo consiguió la mayor de todas las magias, la música.

 

Apenas habían transcurrido pocos días de mi incorporación al grupo “Violent Popes” cuando descubrí al brillante constructor de melodías que transformaba en canciones mis precarios escritos, con una música superior. Fue en una prueba de sonido, en la Sala Tragaluz, en el segundo concierto de “Violent Popes”, cuando tras oírle cantar una canción de la B.S.O. de “Asesinos Natos” supe que quería pasar mi vida junto a él (musicalmente claro) y desde entonces hasta el día de hoy no he vuelto a pertenecer a un proyecto musical en donde Óscar Vadillo no figurara como miembro indiscutible. La música nos acercó, y tras los años consiguió que traspasáramos la barrera del escenario y el local de ensayo para convertirnos en amigos. ¡La de discusiones que habremos tenido! ¡Las barbaridades que nos habremos dicho a la cara! La de pestes que habremos soltado el uno de otro, haciendo buenos los dichos “donde hay confianza hay asco” y “quien bien te quiere te hará llorar”. Mi querido Adolfo Campini, otro grandísimo amigo, siempre era quien intercedía entre los dos (aunque casi siempre se ponía de mi lado). Todo se solucionaba en cuanto nos poníamos a tocar. En directo, un guiño, una mirada, o incluso un redoble del menda, eran suficientes para entendernos. Dudo que haya existido una pareja artística mejor avenida que la nuestra en Badajoz.

LEFT BROTHERS: De izquierda a derecha Enrique Falcó, Óscar Vadillo y Adolfo Campini

 

Tras su marcha a Valencia hace ya algunos años, colgué las baquetas y no he vuelto a tocar con nadie. No es lo mismo. Cuando estás acostumbrado al caviar el resto de exquisiteces te sabe a poco.

Ayer tuvimos la suerte de compartir unas horas, e incluso sustituí el insustituible   LOCH LOMOND por el predilecto JB de Oskita. El bueno del Capitán Haddock sabrá perdonarme, pues en “La Chasca” y a según que horas, no existe tan exquisito brebaje. Aunque nos separen mil kilómetros, siempre considero prioritario pasar tiempo con él cuando nos regala con su presencia, apenas un par de veces al año.

 

Óscar Vadillo es uno de los mejores músicos de Extremadura y estoy convencido de que algún día firmará alguna página en la historia de la música de este país, y allí estaré yo, orgulloso para aplaudirle, e incluso para ayudarle con alguna letra, ¿y por qué no? igual me animo a desempolvar las baquetas para tocar de nuevo con él.

No le pierdan la pista señores. Ya es un gran músico pero dentro de poco será conocido y admirado. Y si no da igual, yo siempre lo querré tal como es, como una gran persona y mejor amigo. ¡Cuento los minutos para que te dejes caer por tu tierra hermano!

Don de LOCH LOMOND

Sobre el autor


junio 2011
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
27282930