Fue en mayo del año pasado cuando se dictaron las dos primeras sentencias firmes en España que declaraban nula la aplicación de la cláusula suelo en las hipotecas. El Tribunal Supremo avaló la sentencia de la Audiencia Provincial de Cáceres que obligaba a Caja de Extremadura a no seguir ejecutándola a los dos clientes extremeños que denunciaron.
En la sentencia, se obligaba a Liberbank , no solo eliminar dicha cláusula del préstamo, sino también a reembolsarles lo que pagaron de más en concepto de intereses y lo que no amortizaron. Así, uno de los demandantes recibió 12.000 euros y el otro unos 8.000 euros.
Estas sentencias, que conocimos a principios de este año, anunciaban el principio del fin de este tipo de cláusulas, tal y como ya expuse en el post La cláusula suelo tiene los días contados en febrero. La Justicia parece que está siendo sensible a todas aquellas prácticas “dudosas” que durante años han estado haciendo las entidades bancarias.
A estas dos sentencias les siguió otra en Badajoz, donde se dio la razón en primera instancia a la entidad, el BBVA. Sin embargo, en segunda instancia, la Audiencia Provincial de Badajoz dictó sentencia en los mismos términos que la justicia cacereña.