La supervivencia del Pequeño Comercio . Los que dicen que saben de política no se juegan su pasta, si no la tuya y desde luego de lo que no saben es de tus cuentas y ya sabes que lo que no son cuentas, son cuentos y de eso… ellos si saben y si te descuidas, te los cuelan.
Normalmente nuestro post siempre hace referencia a útiles consejos para el día a día de la economía doméstica, pero también nos hace falta en muchas ocasiones entender qué hacen los políticos que juegan con tu negocio. La nueva Ley del comercio en Extremadura es una de esas cosas que hace falta entender.
Su aprobación ha dejado en evidencia una lucha entre las grandes superficies y el pequeño comercio poniendo sobre la mesa la cantidad de empleo generado, servicio al público en general, turismo, las inversiones de las grandes empresas, posibilidades de una oferta más amplia de servicio a las ciudades y las consecuencias como siempre las sufrimos quienes no decidimos.
Para entender esta guerra, hay que saber que hay dos posturas enfrentadas en el tema de la reducción de la apertura de comercios en festivos de 16 días al año a 10.
-Por una parte, los que opinan que abrir más domingos al año supone una mejora de la facturación del pequeño comercio, por supuesto de la gran superficie y centros comerciales, y que ello redunda en más puestos de trabajo ayudando además a los pequeños comercios a competir con las grandes superficies.
Por otra, los que opinan que abrir más domingos al año suponen una carga añadida al pequeño comercio que no gana más por ello, ya que el coste de hacerlo supera sus facturaciones.
Las grandes superficies luchan por abrir más días, tienen empleados más baratos y mayores posibilidades de ventas ya que con su marketing agresivo han conseguido posicionar las compras como una actividad lúdica. ¿Cómo pueden hacerlo? : con empleo precario en temporalidad y sueldos, competencia abusiva en precios, y una mayor capacidad de oferta frente al pequeño comercio que ve como no aumentan sus ventas abriendo más festivos ya que las tendencias del consumidor en esos casos es ir a grandes centros comerciales para realizar sus compras mientras se divierten.
Y a partir de ahí, David contra Goliat. Pero en esta pelea también está el caballo de Troya de Internet, que aumentó en un 25% el último año las compras online por lo que en esta pelea, los factores externos harán que no sea cuestión de abrir o cerrar un domingo la clave del pequeño comercio.
El Márketing nos deja bien claro que hacer cuando un producto ha llegado a su fase de madurez. Liquidarlo o relanzarlo. Y como no vamos a liquidar el pequeño comercio, esencia de nuestras ciudades, no necesitamos politicos que nos hagan las cuentas para decirnos lo que pierden las grandes superficies los domingos que no abren, si no que van a hacer para relanzar el pequeño comercio que no se arregla poniendo unos “caballitos” en la plaza de al lado sino invirtiendo en él para posicionarlo en el siglo XXI: la venta online, los terminales NFC y las ofertas e-commerce,cupones online, georeferenciación, actividad ludica, implementación de nuevos sistemas de gestión. Y además:
-Buscar alianzas con las grandes empresas y grupos consolidados a los que puedan ofertar sus productos.
-Aprovechar la incapacidad de las grandes empresas y cadenas de ventas de prestar servicios minoristas de montaje, servicios y asistencia técnica con unos costes adecuados, y de una manera flexible.
-Prestar asistencia a clientes de una manera personalizada, mientras que la gran empresa lo hace al gran público. Y esta actividad tan necesaria es una fortaleza que pueden ejercer directamente como tal para mantener su cuota de mercado, o por cuenta de la gran empresa como oportunidad de negocio.
-Ofrecer la capacidad de especialización que da la fortaleza de adaptación a las necesidades de los clientes frente a la oferta estandarizada de la gran empresa y su variante, ofrecerle dicha fortaleza a la gran empresa para paliar su debilidad de adaptarse a las particulares necesidades de cada consumidor.
-Posicionándose en el siglo XXI, porque el siglo no se para por las absurdas discusiones de los políticos que tienen que justificar sus sueldos mensuales en las Asambleas regionales y ayuntamientos.
-Y para posicionarse deberán especializarse para poder ofrecer al público por una parte, y complementariamente a las grandes empresas sus capacidades distintas y particulares que les hacen mejor que sus competidores.
-Deberán estar al día en comunicación social, redes sociales, ventas online y, en definitiva abriéndose a esa ventana de 14 pulgadas, que es el terminal del ordenador. Limitarse a vender a los 2000 vecinos de tu barrio cuando, con poca inversión puedes hacerlo a los millones de clientes potenciales que ofrece internet, es poco inteligente y un billete al cierre.
-Ganar visibilidad, imagen de marca, branding, aumentando las clientelas potenciales con los nuevos medios que el marketing online pone a tu disposición
-Trato personalizado y atención directa al cliente, capacidad de detectar las necesidades del consumidor de una manera inmediata por su proximidad al mismo, capacidad de adaptación por tener estructuras flexibles y fáciles de modificar ante los cambios de las necesidades del mercado.
Pero no te olvides, si eres pyme y no haces caso de tus claves, fortalezas y oportunidades como te digo más arriba,solo tienes que recordar que, de las carbonerías, solo queda el recuerdo y si no sabes cómo hacerlo, empieza a pensar que los consultores que se dedican a esto siempre son más baratos que cerrar tu negocio.
Y nos da igual lo que digan los políticos. Ellos aparte de conocimientos limitados, no se juegan su pasta, si no la tuya, y desde luego de lo que no saben es de tus cuentas, y ya sabes que lo que no son cuentas, son cuentos y de eso… ellos sí saben, y si te descuidas, te los cuelan.