“3-5% de las mujeres sufren alcoholismo”
Si importante es el alcoholismo de los jóvenes (ver aquí), el “alcoholismo de la mujer” es especialmente difícil, tanto por sus características como por la repercusión familiar que conlleva. La probabilidad de que una mujer, de cualquier edad, se convierta en “bebedora problemática” es de 2 a 5 veces inferior que en un varón, sin embargo la repercusión es más importante.
¿Cuánto y cómo bebo?
Para conocer cuánto y cómo consumo alcohol es necesario conocer que es:
a) un unidad de bebida estándar (UBE)
b) la graduación del alcohol que es la cantidad de gramos de alcohol por 100 ml de bebida (así un vino de 12,5 grados, contiene 12,5 gramos de alcohol por cada 100 ml de vino)
Para calcular tú consumo de alcohol, pincha aquí
El alcohol en la mujer se absorbe y metaboliza más rápidamente, alcanzando una mayor concentración de alcohol en sangre, por dos razones fundamentales:
1.- tienen menos agua corporal.
2.- la actividad de la enzima alcohol-deshidrogenasa es menor en la mujer. Esta enzima presente en el estómago e hígado se encarga de metabolizar el alcohol.
Estas diferencias hacen a la mujer presentar signos de intoxicación con mayor facilidad con un consumo mínimo de alcohol, además que sea más susceptible a la dependencia y a los daños del alcohol sobre los diferentes órganos, especialmente el hígado, el corazón y el cerebro. Y si la mujer consume alcohol durante el embarazo, las repercusiones sobre el feto puede comenzar ya desde la fecundación (“Síndrome Alcohólico Fetal” con importante afectación del cerebro y de la formación del feto).
“Si la mujer está embarazada o quiere quedar embarazada, no debería beber alcohol.”
¿Cómo es el consumo de alcohol en la mujer?
La edad de inicio en el consumo de alcohol en la mujer es algo más tardía que en el varón, que está entre los 13 y 14 años. La cantidad media de alcohol consumido siempre es mayor en varones que en mujeres.
Es interesante diferenciar el consumo de alcohol en función de la edad. Así, en las chicas jóvenes con edad inferior a los 35 años, el patrón de consumo es similar a los varones. La incorporación de la mujer al mercado laboral ha incrementado el consumo de alcohol en ellas.
En la mujer madura lo habitual es que se trate de un consumo en “solitario“, no de bares o en fiestas, “no social”, en muchas ocasiones revestido de problemas psicológicos, como la depresión, ansiedad, alteraciones de la conducta alimentaria,… y por ello habitualmente unido al consumo de diversos fármacos. En definitiva, la mujer con alcoholismo termina bebiendo sola, escondiendo su consumo, avergonzada de su actitud, abandonada a sí misma y a su entorno sociofamiliar.
¿Cómo afecta el consumo de alcohol a la mujer?
Este tipo de consumo solitario y oculto ocasiona un desajuste familiar y social muy importante, a la vez que dificulta la identificación del alcoholismo en la mujer, por lo que cuando se detecta lleva una larga evolución encontrando a la mujer afectada en fases avanzadas del alcoholismo. En ocasiones se encuentra la paradoja de no repercutir en el ámbito laboral, donde el nivel de tolerancia hacia el consumo de alcohol puede ser mayor, más difícil de enfrentar y afrontar.
Los síntomas de deterioro y pérdida de control frente al alcohol suelen aparecer antes en la mujer que en el varón. Los principales efectos del abuso del alcohol y el alcoholismo en la salud de la mujer, entre otros, son:
– Hepatitis alcohólica y muerte por cirrosis, siendo más propensas que el varón.
– El daño cerebral causado por el alcohol en la mujer es mayor y más precoz que en el varón.
– Algunos estudios sugieren que el riesgo de desarrollar cáncer de mama está aumentado en la mujer con consumo excesivo de alcohol. Mayor aún si se asocia al consumo de tabaco.
– El riesgo de enfermedad cardiovascular (infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular,…) es mayor en las personas que tienen un consumo excesivo de alcohol.
Todo ello es la causa por la que la mortalidad en la mujer con alcoholismo es entre el 50 y el 100 por ciento más alta que en los varones con alcoholismo.
Es conocido el importante papel del alcohol en la violencia de género, la violencia familiar, tanto en el maltrato a la mujer como a los hijos o hacia los ancianos. No menos importante lo es en los abusos sexuales, la violación, el incesto, el abuso a menores,… Pero además el consumo de alcohol repercute en el sistema hormonal femenino causando alteraciones hormonales, disfunción sexual, falta de deseo y dificultad para llegar al orgasmo. En ocasiones el alcoholismo en la mujer lleva al desarrollo de celos patológicos que puede terminar en la violencia de la mujer hacia su pareja.
Otra importante repercusión son los accidentes de tráficos relacionados con el consumo excesivo de alcohol en el que la mujer adquiere mayor protagonismo cada día como conductora.
¿Cómo podemos detectar el consumo de exceso de alcohol en la mujer?
Hay algunas situaciones que nos pueden indicar que ya existe un alcoholismo, especialmente si se prolongan durante 12 meses, como son:
– Ausencias al trabajo, especialmente los lunes o tras alguna fiesta oficial
– Dejación en la responsabilidad del cuidado de la familia, especialmente los niños o los ancianos a su cuidado.
– Consumo de alcohol antes o durante la conducción.
– Problemas legales bajo el efecto del alcohol, como pueden ser agresiones o arrestos por conducir en estado de embriaguez.
– Consumo de alcohol a pesar de tener conflictos o tensiones con familiares y amigos, o en el ámbito laboral.
Para detectar si usted o alguien de su entorno tiene un problema con el alcohol trate de responder a estas cuatro preguntas:
1.- ¿Alguna vez ha sentido que debería reducir el consumo de alcohol?
2.- ¿Le ha molestado ser criticado por la manera en la que consume alcohol?
3.- ¿Se ha sentido alguna vez culpable por consumir alcohol?
4.- ¿Ha tomado alguna vez alcohol a primera hora de la mañana para calmar los nervios o para deshacerse del malestar de haberse emborrachado?
Una respuesta positiva sugiere un posible problema con el alcohol. Si respondió “sí” a más de una pregunta, es muy posible que tenga un problema con el alcohol. Debería consultar con su médico de familia o llamar al teléfono de ayuda
El tratamiento se inicia con la voluntad de la persona afectada que desee curarse, a la que hay que sumar una red de apoyo familiar, social y profesional imprescindibles para salir del alcoholismo.
“Alcohol cuanto menos mejor” (OMS, 1995)
INFORMACIÓN DE UTILIDAD:
Otras entradas en el blog sobre el alcohol:
“21 dias con Raquel: calorías en las bebidas alcohólicas.